Paris
Todo el mundo sabe que la ciudad de París es el destino más romántico y con la mejor comida del mundo, y sin lugar a dudas esta reputación está muy bien ganada. La oferta gastronómica de toda Francia es realmente increíble y casi no tiene paralelos con otro lugar del mundo.
Puedes alojarte en hoteles muy caros o en albergues baratos, siempre dependiendo de tu presupuesto, pero nunca dejes de gastar lo necesario en buenos vinos y buenos restaurantes, ya que vale la pena.
Algunos de los consejos para gozar de unas vacaciones inolvidables en Paris incluye: comer en el restaurante "La Duree" sobre Champs Elysees o probar los helados en Berthillon, visitar el museo del Louvre y la catedral de Notre Dame, pasear sobre el Sena en los famosos bateau-mouches; asi como también conocer la increíble tienda de departamentos Printemps, ubicado sobre el boulevard Haussmann. Sin lugar a dudas esta capital es la mas bella ciudad de Europa y ofrece las mas variadas opciones a la hora de pasear y conocer sitios únicos.
En Paris era una fiesta, Ernest Hemingway dijo: “Nunca escribas sobre un lugar hasta que estés lejos de él, porque ese alejamiento te da una mayor perspectiva”. París, una de las ciudades más bellas y extraordinarias de Europa, ha sido descrita en innumerables ocasiones a lo largo del tiempo: estimulante, impactante, inabarcable, con una belleza que impacta todos los sentidos, llena de luz y magia en ocasiones, melancólica y gris en otras… Al visitar la ciudad por primera vez, muchas son las expectativas que genera la capital de Francia a sus visitantes: enamorarse a orillas del Sena, intelectuales, artistas y bohemios en cafés, parisinos antipáticos y altivos, música de acordeones resonando en el empedrado de sus calles… y cuando te marchas de ella, puede que esas expectativas no se hayan visto reflejadas en la ciudad o que, por el contrario, se hayan magnificado. En esta guía, no pretendo dar una lista interminable de monumentos, lugares interesantes y detalles históricos o arquitectónicos de París, sino que mi intención es dar mi visión personal al visitante y una serie de consejos, que según el tiempo y el dinero que se tenga para el viaje, puedan servir de ayuda para encontrar todo aquello que siempre se ha soñado encontrar en París. Tras ese viaje y cuando trascurra el tiempo, tal y como decía Hemingway, es el visitante el que deberá escribir su propia historia sobre París. París es una ciudad con un clima variado, donde cada estación se disfruta de una forma particular. Cuando el termómetro sube en verano, los parisinos acuden al nuevo Paris Plage, a orillas del Sena, donde durante los meses de julio y agosto se disfruta de las piscinas, la arena y las tumbonas. La mejor época para visitar la ciudad es, sin duda, la famosa primavera de París, entre abril y junio, cuando los días son soleados y no hace un calor excesivo. El otoño y el invierno también son apropiados, sobre todo porque hay menos turistas. Aunque, en realidad, cualquier momento del año es idóneo para visitar una de las mejores ciudades del mundo.
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